Fuente: Paola Núñez | 2013-05-23

En la administración de Oscar Arias (2007) se impulsó el proyecto de convertir a Costa Rica en un país carbono neutral, se pretende celebrar el aniversario de independencia número 200 con el anuncio de ser un país neutro.

En el 2010 mediante el decreto ejecutivo 35669 fue creada la Dirección de Cambio Climático, adscrita al Ministerio de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones (MINAET) con la labor de coordinar, gestionar y formular la política pública de cambio climático. Se definió un plan de cuatro fases. La fase I (2006, 2010) implica crecer sin causar impactos en el cambio climático. La fase II (2010, 2014) establece un índice per capita. Con respecto a la fase III (2014, 2018) se define al país como neutro, ya que las emisiones no han crecido, y por último la fase IV (2018, 2021) Costa Rica tendrá emisiones netas.

Según la revista Cuidemos el Aire, la falta de recursos económicos es el mayor obstáculo de este plan, pues el Fundecor y el Minaet estiman que se requieren al menos $8000 millones para atenuar el 83% de las emisiones, aunque no todo el panorama es oscuro, según el FONAFIFO se invirtieron 11219 millones de colones para el Pago de Servicios Forestales (PSA).

Mientras que el gobierno adopta una posición optimista ante la carbono neutralidad, algunas organizaciones ambientales se mantienen escépticas ante las estrategias que están siendo aplicadas para el desarrollo de éste y denuncian el doble discurso del Estado. Opinan que el proyecto rebosa de buenas intenciones pero carece de realidades.

En el 2008, la Federación Ecologista, integrada por grupos ecologistas de Limón, Zona Norte, Pacífico, Talamanca y San José se manifestó alegando que el gobierno ha promovido la carbono neutralidad como la solución al cambio climático, cuando más bien, según ha sido documentado por organizaciones ecologistas en todo el mundo, las compensaciones de carbono ni reducen las emisiones ni ayudan a la humanidad a construir una sociedad libre de combustibles fósiles.

Muchas empresas también se han involucrado con la carbono neutralidad ya que entre otros aspectos más ambientales, presentarse como neutras nacional e internacionalmente les abre puertas de mercado y las ubica dentro de un marco que se mantiene bastante exclusivo y selectivo. Quiere decir que su posición es por conveniencia y no por compromiso con el ambiente

Sería muy beneficioso para Costa Rica alcanzar el gran reto de neutralizar las emisiones de carbono. Pero esto no va de la mano con la solución del resto de problemas ambientales y políticos que tenemos en el país, ejemplo de esto, en el sector transporte, que se neutralicen las emisiones de los vehículos pero con una infraestructura vial destruida por inundaciones más fuertes y frecuentes. Costa Rica neutral pero con un alto riesgo de perder su biodiversidad por cambios en el hábitat y ecología de muchas especies gracias a las acciones humanas.

(*) Estudiante de la Facultad de Derecho
Universidad de Costa Rica